miércoles, 13 de noviembre de 2013

XXXI CAMPEONATO NACIONAL DE RECORTADORES (LAS CONSECUENCIAS)

Abundantes consecuencias tras el XXXI Campeonato Nacional de Recortadores. En todos los planos las hay. En el organizativo-empresarial, en el ganadero, en el de los recortadores y en el circuito de las anillas en general.
En el organizativo-empresarial, la primera  y palpable consecuencia es que hay un alarmante descenso de público. Hay que atajarlo como sea. No se ve la necesidad de que pase como con los roscaderos, teniendo que tocar fondo para resurgir. Se han probado ya cambios en el formato y se ha hecho más atractiva la competición. Los enturbiamientos, en gran parte interesados, de las dos últimas temporadas, han hecho que no se deje cuajar a las ideas enfocadas al bien de las anillas. Y es que clara y objetivamente es pequeño el porcentaje de culpa de Toropasión en la ausencia de algunas vacas y algunas parejas en Zaragoza, ni este año, ni el anterior. Lo que queda es probar un cambio de fecha. Se podría probar una noche...
En el plano ganadero, triunfador Eulogio Mateo. Con sus tres vacas y sin creerse más de lo que es. Humilde y sabiendo lo que tiene. Como no hay pretensiones mayores de las que sus vacas tienen, queda muy bien. Su listón de exigencia irá subiendo por estar ya instalado en la élite de las anillas. La Nº 28 lleva camino de labrarse una gran carrera en las anillas.
Ozcoz sigue estando más o menos donde estaba antes de la cita. Pitos fanáticos oídos en La Misericordia, al margen. Sigue en la cima, aunque con menos ventaja de la que gozó hace unos años. Cierto es que el ciclo va de bajada, pero no es menos cierto que los intentos de enterrarlo siguen siendo vanos. Son ya varias décadas y como decía Julio Iglesias, la vida sigue igual. La pérdida de la Nº 472, le pesará. Aunque toda la vida se han ido vacas buenas. Reponer con una igual, casi imposible, pero otras tendrán que dar la cara ahora.
Domínguez, pues ya parecía antes del concurso que dos de las tres vacas no estaban al nivel de Zaragoza este año. Una lo dejó claro y la Nº 09, sigue siendo muy brava, se acepta. La Nº 015, gran vaca. Esa fue la que le hizo sacar la cabeza en La Misericordia.

En general el problema es grave. No hay apenas 12 reses del nivel que requieren las anillas de Zaragoza en todo el panorama nacional. Cada vez menos concursos y cada vez menor nivel ganadero. Se lo tendrían que hacer mirar muchos, que no sacan ni una vaca en toda una ganadería. Si no tienen vacas apropiadas (las bravas son las que valen para esto), no se les contrata para hacer concursos. Si no hacen concursos, menos aún van a tener vacas para anillas. Está la cosa muy mal.
Cuairán número 1
Foto: Estefanía
En cuanto a los recortadores va a haber un vacío de poder. Manolo se va y deja un hueco que habrá que ocupar como mandón de las anillas. Está claro que el testigo lo recoge Cuairán, soberbio en Zaragoza y el recortador en activo con un mejor palmarés. Ha sido dominador desde 2009 junto con Manolo, con el paréntesis de 2012. El de Borja tiene que ser ahora capitán general en las anillas. 
Salen reforzados de Zaragoza / Temporada 2013: Héctor Colás, que ha acabado bien el año aunque no lo empezara bien. Rodrigo Puértolas ha progresado enormemente gracias a empezar la temporada con Manolo. Héctor y Jesús y Jaume y José Manuel, por la buena temporada que han hecho, metiéndose entre las mejores parejas del circuito. Javier Navascués por la raza demostrada en Zaragoza, queriendo meter la anilla para llegar a la final, aún a costa de saber que iba a ser cogido.
Y cómo no, Mario González, que es el futuro de las anillas. Por raza, pundonor y mentalidad ganadora, está llamado a hacer historia en los recortadores. El concepto de entender esto de Mario es el que hace falta para que las anillas resuciten. Capacidad de sacrificio para entrenar y estar fuerte, orgullo para no dejarse ganar la pelea nunca y rasmia como para tirarle a cualquier vaca sin aliviarse. Con unos cuántos más con esa mentalidad, las anillas llenarían las plazas.
En conjunto hay una consecuencia importante tras Zaragoza. Nadie es imprescindible. Durante la temporada ya pasó en otras citas la ausencia de parejas importantes. Y no pasó nada. Como hubo nueve parejas que sí quisieron dar la cara con el formato de eliminación, pues el Campeonato Nacional se disputó con total normalidad. Y no fue el peor de los últimos años, ni mucho menos.

En cuanto al circuito de las anillas en general, la cosa está clara. La mentalidad de unos es casi antagónica con la de otros. Unos no tienen problema en asumir retos, otros no quieren. Normalmente las declaraciones en las entrevistas que hacen en los concursos televisados, dan muestras de cómo piensa cada uno por el bien de las anillas.
El formato salió reforzado en Zaragoza. Todo de lo que se le acusa, se demostró falso. Un dato. Ante la posibilidad de un empate en la final, Manolo y Mario hablaron y acordaron que a desempatar con una tercera vaca. Si se tiene orgullo, se piensa así. Y no son de boquilla, lo demostraron en la arena. 
De lo de dejar a parejas fuera, mejor no hablar. ¿Quién faltaba en Zaragoza al margen de las tres parejas que no quisieron salir? Esa supuesta solidaridad, que se vea en los concursos que se cierran a 10 pudiendo ser a 12, o aún más en los que se cierran a 5. Entonces habrá coherencia. El día que algunos crean que hay 20 parejas para poder salir en Zaragoza, ¿qué se pedirá? Menos postureo corporativista y más ver la realidad y decirles a unos cuántos compañeros la verdad. Es decir, si queréis salir en Zaragoza, espabilad.
O cambia la mentalidad y se sale a todos los concursos como se sale en Zaragoza, o esto se irá muriendo lenta y agónicamente. Faltan ganas de querer ser mejor, de progresar. No se ven ganas de ganar. Lo sacrificado es prepararse físicamente para estar en plenas facultades. ¿Cuántos de los que salen a los concursos lo hacen?
Aquí a nadie se le obliga a ser recortador. Si se quiere ser, hay que asumir que hay que hacer sacrificios por una razón fundamental, en los tendidos se sienta gente que ha pagado por verlos.
Estas son las consecuencias del XXXI Campeonato Nacional de Recortadores.

3 comentarios:

  1. Vicman muy negativista veo tu articulo. Coincido en el nivel de publico de la misericordia y en la reducion de numeros de concurso a lo largo del año, y que es aqui donde hay que trabajar pues este mundo depende de nuestra aficion. Pero creo que por ser lo que somos, una tradicion de una region del pais debemos de estar juntos y no se puede prescindir de mariano, diago y los navarricos y meno aora que no estara manolo.

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  2. Yo estuve viendo el concurso de zaragoza y la percepcion que tuve es que el publico era publico que ya conocia de que iva esto, es decir que ya habia visto algun concurso antes y que sabia quien eran los de la plaza; en deprimento de otro tipo de publico como pueda ser una familia que busca pasar un buen rato y va a ver a la plaza algo " espectacular , como les puedan parecer los cortes o los propios cortes con toros de fuego "
    Ademas vicman ¿nos puedes adelantar alguna pareja para el siguiente año?

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  3. Si yo no quiero prescindir de ellos ni mucho menos. De hecho, nadie ha querido prescindir de ellos. Son ellos los que no quisieron estar. E imprescindibles tampoco son. Ni ellos, ni nadie. Al año que viene, sin Manolo, habrá concursos igual. Unión, claro que la quiero yo también. Pero unión por arriba con compromiso por sacar adelante este mundillo. No unión a la baja para una mayor comodidad de todos y un compadreo que va en detrimento del espectáculo.
    Un saludo.

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